DESCRIPCIÓN

Esta práctica agraria contempla la utilización de tecnología avanzada en la explotación la cual permita al agricultor optimizar el manejo de su explotación, gracias a una mejor realización de las operaciones o a un mayor conocimiento de las parcelas cultivadas. La tecnología en este caso es diversa, y se contemplan las siguientes opciones:

• Guiado por GPS en los tractores, el cual permite la realización de operaciones con gran precisión, evitando solapes o zonas sin tratar.
• Utilización de Sistemas de apoyo a la decisión en base a la información obtenida a través de una red de sensores situados en la explotación, en la maquinaria o en otros elementos como plataformas no tripuladas, “drones” e incluso satélites. Todos estos sensores permiten generar una gran cantidad de conocimiento acerca de la meteorología y las características de nuestra explotación: la variabilidad del tipo de suelo, mapas productivos y de calidad de la cosecha, estado nutritivo e hídrico del cultivo, etc. Dicho conocimiento sirve como base para realizar mapas de prescripción de tratamientos agroquímicos, como por ejemplo mapas de prescripción de abonado y de tratamientos herbicidas, que son los más comunes.
• Como alternativa a este sistema se pueden usar sensores que en tiempo real miden el parámetro deseado, realizar los cálculos pertinentes, y actuar sobre la maquinaria sin necesidad de intervención del tractorista. Estos sistemas son menos precisos, pero menos costosos y más rápidos. Normalmente se apoyan en sensores basados en tecnología NIR, que miden, por ejemplo, el estado nutritivo del cultivo y calculan la dosis de abono a aplicar en función del mismo. También se pueden aplicar para la detección de malas hierbas en tiempo real y realizar tratamientos sitioespecíficos sólo donde aparecen éstas.

BENEFICIOS

• Mejor conocimiento del agricultor de su propia explotación y capacidad para tomar decisiones.
• Optimización del uso de insumos.
• Mejor estado vegetativo de los cultivos y por ende, incremento de la producción.
• Reducción de la cantidad de agroquímicos a utilizar.
• Incremento de los beneficios económicos de la explotación agrícola.
• Reducción de la huella ambiental de la agricultura.